Biden hace foco en las restricciones al aborto como tema de campaña con mira a las elecciones de noviembre

El aborto vuelve a ser tema central de la política estadounidense. Anoche, el presidente Joe Biden incrementó el nivel de confrontación con los republicanos al referirse al derecho al aborto en un discurso frente a un grupo de influyentes activistas demócratas.

Según el presidente, lo que los republicanos buscan es expandir las limitaciones de acceso al aborto para que este sea legal solo en un período en el que la mayor parte de las mujeres aún no saben que están embarazadas. Además, Biden dijo que piensa que los republicanos intentarán aprobar una prohibición nacional del aborto, si es que logran la mayoría en el Congreso, y aclaró que si ese fuera el caso, el lo vetaría.

Al referirse a la decisión de la Corte Suprema durante el verano de revertir el fallo de Roe v. Wade, Biden afirmó que esto movilizará a miles de personas en noviembre a acercase a las urnas para votar en contra de lo estipulado por el tribunal supremo, apoyando a candidatos a favor del aborto.

Pero el presidente fue más allá, y en línea con sus acusaciones de la semana pasada en las que dijo que la verdadera amenaza del país eran los simpatizantes de Donald Trump, ahora pronosticó que los republicanos no se conformarán con el acceso al aborto, sino que intentarán limitar otros derechos civiles, como el matrimonio igualitario o el acceso a métodos anti-conceptivos.

Desde que la Corte Suprema revirtió el fallo Roe v. Wade, ha habido una enorme cantidad de protestas a favor y en contra del aborto en todo el país

“Los republicanos no tienen ni idea del poder de las mujeres. Pero déjenme decirles algo: están a punto de descubrirlo”, decía Biden entre aplausos en una reunión del partido demócrata en el estado de Maryland, muy cerca de la ciudad de Washington.

En 14 estados el procedimiento del aborto no está disponible pasadas las 6 semanas de gestación, en algunos casos sin excepciones por incesto o violación. En otros 13 estados, las reglas pudieran volverse más estrictas en cuestión de meses.

“En cuestión de semanas o meses, más de la mitad del país va a haber prohibido el aborto si nosotros no ganamos esta elección en noviembre. Y no van a parar allí”, decía Biden.

Si bien mucho de lo dicho por el presidente es opinión personal difícil de comprobar, es una realidad que a lo largo del país ha habido varias elecciones especiales con temas relacionados al aborto, que según los analistas llevaron a un número récord de mujeres a las urnas. Los estrategas demócratas están viendo en el aborto la carta que les permitirá motivar al electorado en noviembre, en medio de un clima hostil para su partido por las cifras históricas de inflación y la inminente recesión económica.

El presidente volvió a hacer una diferenciación entre dos tipos de votantes republicanos: los que él llama extremistas MAGA (seguidores de Trump), a los que catalogó como “peligrosos y anti-democráticos”, y los republicanos “normales”. Biden fue duramente criticado la semana pasada por esta calificación de ciudadanos estadounidenses, pero anoche la repitió.