De acuerdo con el jefe de Estado, la cuarentena, que sigue a la cumplida entre el 17 de marzo y el 10 de mayo, será aplicada al menos hasta el 1 de diciembre.
Todo el territorio nacional estará bajo confinamiento, con adaptaciones para los territorios de ultramar; las escuelas seguirán abiertas y el trabajo continuará, adelantó.
Macron insistió en la necesidad de apelar al teletrabajo donde sea posible y llamó a los franceses a respetar las reglas y a mantener la unidad y la solidaridad en el desafiante escenario.
Al igual que durante la cuarentena de la primavera, las personas podrán salir a trabajar, asistir a citas médicas, ayudar a otros, realizar compras o tomar aire, siempre con una autorización, recordó.
Según el presidente, la medida será evaluada cada 15 días, en aras de examinar si pueden atenuarse las restricciones.
Asimismo, informó su participación en un consejo de la Unión Europea para coordinar las respuestas sanitarias frente a la Covid-19.
Mañana, el primer ministro Jean Castex expondrá las decisiones de Macron en la Asamblea Nacional y el Senado, para después ofrecer en una conferencia de prensa los detalles del reconfinamiento.
Francia ronda los 200 mil contagios en los últimos seis días, con una tasa de positividad superior al 18 por ciento y más de dos mil 400 focos activos de transmisión de un patógeno responsable desde el 1 de marzo de más de 35 mil decesos en suelo galo.
