Para enfrentar este creciente problema se analiza en el Senado de la nación una ley para regular la gestión bancaria en medio de una controversia entre el nivel de responsabilidad que recae en los clientes en este tipo de situaciones.
En 2005 se creó la Ley 20.009, la cual establece que al detectar un uso fraudulento de su tarjeta de crédito en caso de robo o extravío, el cliente debe demostrar al banco su inocencia.
Pero el proyecto legislativo que actualmente se analiza en la Cámara Alta busca aumentar las responsabilidades que ante estos delitos tienen los bancos, los cuales han tratado de poner obstáculos a la iniciativa para que no progrese su aprobación.
Al respecto, el diputado liberal Alejandro Bernal, integrante de la comisión de Economía de la Cámara, declaró a los medios que la discusión se debe centrar en la eliminación de seguros y en la ciberseguridad.
Pero los especialistas en la materia y representantes de las entidades financieras insisten en que también el cliente tiene un determinado grado de responsabilidad.
Los impulsores del proyecto legislativo esperan que sea aprobado durante las próximas semanas.
