La colocación de los ingredientes de la ensalada puede influir en los sabores y en la textura de los alimentos
Con la llegada del buen tiempo, regresa la fiebre de las ensaladas verticales o combinaciones de alimentos frescos en «Mason Jars» o tarros de cristal. Una fórmula que está desbancando al tradicional «tupper» (incluso aunque este también sea de cristal), tanto para llevar al trabajo, como para ir de picnic.
La explicación a este éxito está en que los
ingredientes resultan muy atractivos cuando se colocan en los tarros de vidrio (se juega con los colores y las texturas). Además los tarros permiten conservar mejor la comida y los aromas y aporta una mayor facilidad para calentar el plato (en caso de que sea necesario) sin que los alimentos pierdan sus propiedades. Otra de las ventajas es que son fáciles de preparar, más cómodos para transportar (gracias a su verticalidad) y muy «instagrameables», es decir, sus combinaciones de colores, formas y texturas resultan especialmente atractivas para fotografiar.
De hecho, esta particular fórmula de «take away» sigue ganando adeptos y desde hace años se comparten ideas para elaborar estos platos verticales (en los que predominan los vegetales) en Instagram con el hashtag #masonjarsalad.
Una de las defensoras de esta fórmula es la coach nutricional Marta Vergés, que además propone ideas para elaborar estas ensaladas en su libro «Cómete el tarro» (Ed. Planeta), donde aporta 60 recetas en las que priman los productos ecológicos y los vegetales y anima a recuperar el amor por lo crudo.
Además de la estética a la hora de colocar los alimentos, que es algo personal y permite desplegar la creatividad de cada uno, la experta aconseja seguir unas pautas y un orden a la hora de colocar los alimentos que permite aumentar tanto su conservación, como la calidad y el sabor de los elementos de la ensalada o plato vertical.
Cómo organizar los alimentos en el tarro
Las pautas que da la autora de «Cómete el tarro», Marta Vergés, son:
– Coloca en el fondo los alimentos que tengan salsa o estén macerados o los vegetales que suelten agua.
– Para ordenar los alimentos por capas debemos incluir los de más peso al fondo y los de menos peso arriba, es decir, por capas y por orden de peso.
– En la parte superior se colocan los ingredientes de hoja para que se mantengan frescos y a modo de «topping» pueden incluirse semillas, frutos secos o frutas deshidratadas para dar un toque crujiente.
– Es aconsejable llevar los aliños (aceite de oliva virgen extra, vinagretas o salsas caseras) aparte para evitar que los alimentos se ennegrezcan o se reblandezcan.
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