La práctica se extendió de 2005 a 2015 de acuerdo con una investigación de la Oficina de Protección Financiera del Consumidor (CFPB, siglas en inglés), que llegó a un acuerdo con American Express (AMEX).
La compañía informó en 2013 de un error estructural que permitía la discriminación que, de acuerdo con la agencia federal, no se configuró de manera intencional.
Según la CFPB, estas prácticas van en contra de la normativa de igual oportunidad crediticia, que prohíbe la discriminación contra el consumidor por cuestión de raza, etnia u origen.
AMEX ya pagó 95 millones de dólares en daños a 221 mil 932 consumidores afectados, y ordenó el pago adicional de un millón.
La agencia reguladora estadounidense no impuso penalidades mayores porque fue la propia empresa que informó las violaciones y procedió a establecer un plan correctivo para compensar a los consumidores.
‘Estas prácticas no son muy distintas a las de otras compañías multinacionales que con frecuencia atienden los asuntos de Puerto Rico como parte de sus divisiones de América Latina y no como parte de Estados Unidos’, dijo Pierluisi Rojo.
Indicó que el DACO atenderá cualquier señalamiento de prácticas discriminatorias que afecten a los puertorriqueños.
