Rey Díaz, nadaorg.22@outlook.com
Ciudad de Nueva York. –En la República Dominicana el oficio de periodismo como profesión es un trabajo muy riesgoso, y mal pagado, amén de las tensiones obrero-patrón con que se ejerce el trabajo de reportar los acontecimientos más transcendentes de la vida pública a nivel nacional en este país caribeño.
El periodista es testigo ocular de los sinsabores, las amarguras y atropellos que viven muchos ciudadanos, en una nación bendecida por una naturaleza hermosa y unos paisajes retocados por la belleza del mar, sus palmeras, sus ríos, las flores y su gente.
Se nota un gran contraste entre la naturaleza, los paisajes tropicales, y los lugares de trabajo como también las fuentes noticiosas que cubren con frecuencia los reporteros que ejercen el periodismo en la República Dominicana. A todos estos reporteros, el pueblo que lee sus informes noticiosos es deudor, así como también a los empresarios que invierten considerables sumas de dinero en la producción y publicación de estos medios sean impresos, radiales, televisados, o digitales.
Pero lo que no vemos bien es que un reportero, además del peligro que corre para cubrir la fuente noticiosa, tenga que correr igual, o peor riesgo al ejercer sus labores en condiciones que representan un peligro para su salud física y las de aquellos y aquellas que le rodean.
Estoy haciendo referencia al caso entre el periodista Leyton Mejía quien fue despedido por la periodista y empresaria Nuria Piera por quejarse de las malas condiciones del vehículo asignado para ir hasta Bonao para cubrir los incidentes de John Percival Matos quien murió en un supuesto enfrentamiento entre él y miembros de la policía nacional.
Según el periodista Leyton Mejía, el vehículo asignado por la empresa para cubrir esa noticia, tiene problemas con el tren delantero, y al desplazarse, el vehículo se inclina hacia un lado de la carretera, además de que los frenos necesitan reparación. “Es un vehículo”, según Mejía que “solo le funciona bien el aire acondicionado.” Leyton Mejía divulgó además que los pagos de peajes son cubiertos por los mismos periodistas y reporteros que cubren las noticias, quienes deben ejercer su labor sin dietas por el trabajo, y bajo un clima de malos tratos, e insultos.
ListinUSA.net después de una investigación exhaustiva sobre este tema se solidariza con las declaraciones de Olivo De León, presidente del Colegio Dominicano de Periodista de que en vez de arreglar el vehículo, que era lo correcto, la respuesta de Nuria Piera, directora del canal 37 y de CDN Radio, fue cancelar al periodista.
La directora del Canal 37, Nuria Piera, ha gozado por algún tiempo de una arrogancia singular en su trato con otras personas, pensando que ella es dueña y señora de la verdad…Amen de creerse en control de la objetividad y la honestidad periodística.
Pero la forma de ella tratar y despedir al distinguido periodista Leyton Mejía, quien ha actuado en beneficio de la empresa canal 37, nos hace denunciar la arrogancia de esta ejecutiva y periodista dominicana como una conducta inadmisible para las relaciones publicas internas, y externas de un medio de comunicación cuya imagen después de este incidente, no solo pone a la empresa en peligro de continuar deteriorando su débil imagen, sino que contradice la forma ética en que debe conducirse un periodista y empresario a ese nivel.
Pero el asunto no llega hasta ahí, Nuria Piera también despide a la periodista Paloma Martínez por haber subido en las redes sociales una foto junta al embajador de Venezuela Alberto Castelar, acreditado en la República Dominicana.
No me ha parecido bien este despido, pues ella queriendo atacar el gobierno Venezolano, que disfruta de unas saludables relaciones diplomáticas con la República Dominicana, independientemente de sus desacuerdos con el gobierno del Presidente Nicolás Maduro, su trato en la entrevista al embajador Venezolano nos parece repugnante y agresivo, llegando a ser un acto sin comparación en la historia de la prensa radial, escrita y televisada de la República Dominicana.
Nuria Piera está fuera de control, y sin ser psicóloga, o algo que se le parezca en sus insultos al embajador venezolano Alberto Castelar, dijo entre muchos otros epítetos, que él tiene una neurosis, que es insolente, mal educado, que no tiene nada que hacer en este país, y que él no deja hablar a nadie cuando ella fue quien lo interrumpió en reiteradas ocasiones.
Nuria tiene que saber que un embajador de cualquier país, siempre va a hablar bien de su país y de su gobierno. Además, ella debe saber que si entrevista a una persona con cierta preparación académica, no le va a decir lo que ella quieras oír, sino de lo que él, o ella dese hablar.
Las entrevistas siempre se hacen a otras personas para escuchar lo que tienen que decir. Si esto no fuera cierto, entonces debes hacerte la entrevista a ti misma, y dile a tu audiencia lo que tú creas que ellos deben escuchar. El buen periodista presionará al entrevistado, mostrando buenos modales, y hasta cierto punto durante la entrevista ver si logra sacarle los detalles que sean de interés al público en general pero siempre en el marco de la formalidad, y el respeto que merece el entrevistado.
Volviendo al tema sobre las cancelaciones de los periodistas Leyton Mejía, y Paloma Martínez nos parecen un abuso de autoridad y creemos que deben ser ambos restituidos en funciones, sin ser hostigados, ni maltratados en ninguna forma.
Es más si en un futuro no muy lejano escuchamos que algún vehículo de la empresa del canal 37, tiene un accidente y causa la muerte, o heridas a un empleado del canal, o a otras personas que transiten por las calles, o las carreteras del país, Nuria Piera deberá ser citada para que responda ante la justicia, pues su respuesta ante este problema reportado por Leyton Mejía debido el mal funcionamiento de los vehículos de la empresa, no ha sido la más saludable.
Es una conducta infantil despedir una reportera por el simple hecho de tomarse una foto con un embajador con quien tuviste una acalorada discusión. Si tú te buscaste una enemistad con el embajador venezolano acreditado en el país, no significa que todos los que trabajan en tu empresa deben ser enemigos del embajador venezolano.
Lamentable carecemos de un sistema de justicia que funcione debidamente en el país, pues en los Estados Unidos, cualquiera de los dos periodistas pudiera llevarte a la corte, y estoy seguro que pierdes el caso, y tienes que restituir a ambos periodistas en sus funciones y con el pago de sus salarios retroactivos por el tiempo que duraron sin trabajar por el despido injustificado.
https://www.youtube.com/watch?v=7dbVVIw8jPo
