Denuncian connivencia entre Reino Unido y EE.UU. en caso Assange

Por Néstor Marín
De acuerdo con Long, la reciente decisión de la justicia británica de mantenerlo en prisión después que purgue una condena por violar una fianza relacionada con un caso de la justicia sueca, confirma los temores de Ecuador cuando decidió otorgarle asilo en 2012, de que se trataba de una persecución política.
Cuando era canciller y hablaba con las autoridades británicas, ellos me decían que nuestros temores eran infundados, e incluso llegaron a decirnos que éramos un Estado paranoico, porque su único interés era resolver las acusaciones por presuntos delitos sexuales presentadas por Suecia, recordó.
Tras apuntar que la fiscalía sueca decidió archivar el caso en mayo de 2017, y que un reciente intento por revivirlo tampoco prosperó, Long remarcó que la única razón para mantenerlo ahora en la cárcel, es garantizar que pueda ser extraditado a Estados Unidos para condenarlo por la publicación de los archivos sobre la diplomacia y los militares norteamericanos.
Quieren tenerlo a buen recaudo, encerrado, para estar seguros de que van a poder entregarlo a Estados Unidos, agregó el excanciller, tras acusar al gobierno británico de haber mentido todos estos años cuando decían que sus reclamos no tenían nada que ver con la extradición ni con Wikileaks, y que su interés era resolver el tema sueco.
Assange, quien estuvo asilado siete años en la embajada de Ecuador en Londres, fue arrestado por Scotland Yard en abril pasado, después que el gobierno del presidente Lenin Moreno le retiró la condición de asilado concedida por Correa en 2012.
Al respecto, Long consideró ‘gravísimo’ que Moreno haya violado el principio internacional de jamás entregar a otro país a una persona a la que se le ha otorgado asilo, pues se le está condenando a la cárcel.
Creo que es un caso que va a marcar la historia de Ecuador, sentenció el exdiplomático, tras advertir que Estados Unidos ‘no lo va soltar’, y que la justicia británica va autorizar la extradición del fundador de Wikileaks en la vista prevista para febrero de 2020.
Condenado en abril pasado a 50 semanas de cárcel por saltarse la fianza relacionada con el caso sueco, Assange es elegible para salir en libertad el 22 de septiembre tras cumplir la mitad de la sentencia, pero una jueza británica determinó ayer que deberá esperar en prisión el juicio sobre su extradición a Estados Unidos, previsto para febrero próximo.
De ser entregado a la fiscalía norteamericana, Assange enfrentaría 18 cargos, entre los que se incluye el delito de conspiración para cometer piratería informática, y que conllevan en total una condena a 175 años de prisión.
Todo esto demuestra que Ecuador tenía razón desde el inicio, que se trataba de una persecución política, y que la máxima expresión de esa persecución sería una orden de extradición de Estados Unidos que se traduciría en una pena de cárcel en territorio norteamericano, recalcó Long.