«Toda mi vida trabajé para este país»: Política de Trump rompe familias que llevan décadas en EE.UU.
RT muestra el testimonio de una familia radicada en territorio estadounidense desde hace casi tres décadas que las decisiones de la Administración Trump podría separar.
actualidad.rt.com
Foto: Internet
La familia Torres García vive días de angustia. Después de 25 años en Estados Unidos, Miguel y Patricia serán deportados a Perú el próximo 2 de enero después de que les denegaran su petición de asilo político. Su único hijo, Juan Miguel, aún no asimila un futuro lejos de sus padres.
«Veo un futuro distanciado de mis papás y no quiero que sea así, quiero que estemos juntos. No van a estar en mi boda, con mi futura esposa. Quizás no estarán en el hospital cuando nazca mi hijo… Estarán en Perú, no acá», explica ese joven.
«No tiene compasión por nadie»: Fox culpa a Trump de la muerte de la niña guatemalteca en EE.UU.
Juan Miguel Torres nació en Perú pero, de momento, está amparado por el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, por sus siglas en inglés). Sus padres no quieren que sufra más y saben que lo mejor es que se quede en el país en el que se educó y comenzó una carrera profesional.
«Cuando llegamos, lo hicimos con nuestro único hijo, que tenía nueve meses cuando llegó a este país. Ahora tiene 26 años. Él no conoce otro país, este es su país, y ahora nos están separando de él: eso es lo más triste», cuenta Patricia García, quien detalla que «eso me parte el corazón».
Su padre, Miguel Torres, explica cómo asume un momento «inimaginable, impensable» que le resulta «devastador» porque podrían ser las últimas Navidades que pasa con su único hijo.
Un país al que han dedicado sus vidas
Quizás las caras más visibles de las separaciones familiares que se producen en EE.UU. sean la de los menores apartados en la frontera, pero muchas familias como los Torres García llevan décadas en territorio norteamericano y solo desean permanecer unidas en el país al que han dedicado sus vidas.
De hecho, todos sus años empleados de manera legal gracias a los procesos de apelación se podrían quedar en nada: «Con 62 años podría tener ya mi retiro, pero lo pierdo todo. Toda mi vida trabajé para este país, 25 años pagando impuestos», señala García.
Irregularidades en el proceso migratorio
Ambos cónyuges aseguran que su proceso migratorio tuvo irregularidades, ya que quedaron en un limbo legal porque las autoridades estadounidenses perdieron parte de su expediente. Si les expulsan, al drama de perder todo lo cosechado durante un cuarto de siglo se unirá la incertidumbre de empezar de cero.
«Yo no tengo a nadie en Lima. Yo llego y no tengo trabajo, no tengo familia, no tengo casa, no tengo seguro de salud, ¡No tengo nada a mis 62 años!», lamenta esta mujer.
Sueño americano
Esta familia se ha movilizado de diferentes maneras, desde mandando cartas a políticos hasta recopilando firmas para obtener una solución. Asimismo, centenares de parientes y amigos les han avalado como personas trabajadoras, honradas y que han aportado a la comunidad.
«Hemos hecho todo lo posible en este país. Vivimos legalmente, pagamos impuestos, trabajamos legalmente, no tenemos un récord criminal. ¡Yo me críe acá por 25 años! Yo quiero ser americano y, por favor, ya estamos acá: acéptennos, lo merecemos. Que miren nuestro caso y abran un proceso para ser ciudadanos», suplica Juan Miguel Torres.
Ya ha comenzado su cuenta atrás y aprovechan al máximo cada minuto juntos mientras piden clemencia y justicia para el sueño americano que persiguieron con tanto esfuerzo no se convierta en una pesadilla.