Opinión

Vladimir Guerrero, ejemplo y motivo de orgullo

Por: Rafael A. Escotto

 

 

 

«Todo lo que necesitas en esta vida es confianza y perseverancia, entonces el triunfo será seguro«.-Mark Twain.

 

 

 

Algunos se afanan en ocultar los pobres que fueron alguna vez. La pobreza parece  que lo estigmatizó de tal manera que le impidió ver que más allá del fenómeno del arcoíris hay un trofeo a la sencillez, a la vida y a la perseverancia. Cuando vi en la tele y en la prensa escrita el triunfo de Vladimir Guerrero me acordé de una frase famosa del escritor británico, John Ruskin: «No hay riqueza sino vida«

 

 

 

¿Dónde se asienta la verdadera riqueza de este atleta dominicano? En su modestia, en su testimonio, en sus mensajes breves y positivos.

 

 

 

¿Es malo ser excesivamente humilde? No lo es porque al fin y al cabo no recibes las recompensas de los seres humanos la recibes de Dios quien es que está mirando tus obras y tus actos.

 

 

 

Se dices también que Vladimir solía compartir con sus compañeros de club el alimento que cocía con sus manos prodigiosas su madre y lo hacía con sencillez y sus compañeros de equipo lo recibían gozosos.

 

 

 

Es posible que para el hombre presuntuoso o arrogante este acto del pelotero de Grandes Ligas no fuera lo que lo llevó a ocupar un lugar señero en el Clark Sports Center  del pueblo de Cooperstown (Nueva York), pero sí habla mucho de la calidad interior de su alma y de su solidaridad.

 

 

 

Mientras oía los comentarios de la gente en las calles y carreteras del país, lo que más me conmovió fue la frase de unos niños que jugaban «vitilla«: «! Yo quiero ser algún día como Vladimir!«

 

 

 

Esos niños no deseaban ser ni negros ni blancos ni mucho menos estar en Cooperstown: pretendían imitar la humildad, la solidaridad, la fortaleza de espíritu y la mansedumbre de Vladimir Guerrero Alvino.

Entonces, me dije a mi mismo: ¡Hay esperanza de Patria!

 

 

 

¿De qué es de lo que más hablan los fanáticos del beisbol de Vladimir?

Se habla de la potencia de su bate, de su corpulencia física y de su estilo al darle a la pelota, sobre todo a los lanzamientos malos. Lo que más se comentaba en los camerinos, en el banquillo o dogouts, en los estadios de béisbol de Grandes Ligas, era y es aún, la generosidad de este extraordinario atleta y beisbolista dominicano.

 

 

 

El pueblo de don Gregorio, lugar de nacimiento de Vladimir, ha pasado a ser de un poblado de gente humilde y prácticamente desconocido a una comunidad colocada en el mapa mental mundial de los amantes del beisbol.

 

 

 

¿Qué otra cosa motivó a los cronistas deportivos estadounidenses elevar a Vladimir Guerrero al Salón de la Fama del beisbol?  Mejor dejo que sea el escritor y poeta también estadounidense, Ralph Waldo Emerson quien responda esta interrogante: «El regalo más grande es dar una parte de ti mismo«

 

 

 

Pocas son las personas que le dedican tiempo a mirar al interior de los seres humanos. ¿Por qué? Dicen algunos que el alma es tan abstracta e inmaterial que de ella solo se reciben sentimientos, y por tanto, no puede ser estudiada por la ciencia.

 

 

 

Sin embargo, cuando analizo el carácter de Vladimir, ya sea en el campo de juego o fuera, veo a una persona en su totalidad.

 

 

 

Solo un ser como Vladimir pudo hacer lo que hizo y hace todavía. Esto explica por qué los niños querían imitar a Vladimir Guerrero. Es que los ángeles están muy cerca de los niños y pueden servirles como consejeros espirituales; fue así como los niños pudieron apreciar el alma buena que reside en el interior de este ser humano. Nunca se fijaron en su exterior.

 

 

 

El ejemplo de vida de Vladimir Guerrero Alvino, como atleta del beisbol escogido para formar parte del exclusivo y privilegiado Salón de la Fama ha quedado prendido en el sentimiento y aspiración de los niños dominicanos y del mundo.

 

 

 

Su labor ha penetrado como un paradigma construido por este hombre y deportista excepcional quien habiendo surgido de la pobreza y la discriminación se llenó de afanes y alcanzó la gloria de la inmortalidad del pasatiempo nacional más importante y favorito de los Estados Unidos. Una frase de Tommy Lasorda sintetiza el esfuerzo de Vladimir, veamos: «La diferencia entre lo imposible y lo posible radica en la determinación de una persona«

 

 

 

Termino este trabajo con una frase de Séneca: «Largo es el camino de la enseñanza por medio de teorías; breve y eficaz por medio de ejemplos« Vivamos e imitemos el ejemplo de Vladimir Guerrero y entonces tendremos tiempo de ver despuntar aquella ilusión que llamamos patria.

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