Presidente peruano intenta justificar indulto, tras protestas
Las manifestaciones llegaron a asediar la casa del mandatario y la clínica privada en la que Fujimori fue ingresado el sábado por una arritmia cardíaca, lo que motivó acciones policiales compulsivas para dispersarlos con gases lacrimógenos.
Kuczynski asumió la decisión y señaló que la tomó en ejercicio de sus facultades presidenciales y dedicó parte del mensaje a los jóvenes volcados a las calles, a quienes pidió ‘que las emociones negativas heredadas del pasado no limiten los objetivos que tenemos que alcanzar para terminar de vencer a la pobreza’.
‘No nos dejemos llevar por el odio, no paralicemos nuestro país
Pasemos esta página y trabajemos todos por nuestro futuro, que es el futuro de los jóvenes del país’, agregó mientras los colectivos estudiantiles y sociales coordinaban nuevas protestas.
Alegó que indultó a Fujimori porque estaba en juego ‘la salud y las posibilidades de vida de un expresidente que, habiendo cometido errores y excesos graves fue sentenciado y ha cumplido ya 12 años de condena’.
Reconoció que en su campaña electoral dijo que no daría el indulto al exgobernante (1990-2000) y sugirió que una ley autorizara la prisión domiciliaria a condenados en la condición de Fujimori, lo que no fue aceptado por el nuevo parlamento de mayoría fujimorista.
Señaló que Fujimori ‘incurrió en transgresiones significativas a la ley, al respeto por la democracia y a los derechos humanos, pero también contribuyó al progreso nacional’.
Tras argumentar que no es admisible permitir que Fujimori muera en prisión, admitió que ‘todo indulto es por esencia controversial’ y que un sector importante de peruanos lo rechaza, añadiendo que ‘mi decisión es especialmente compleja y difícil, pero es mi decisión’.
También hizo un llamado a la reconciliación que cure heridas abiertas y que el indulto ‘se asienta en razones humanitarias y en lo que considero mejor para el futuro del país’.
Tras el mensaje, Marisa Glave, parlamentaria de Nuevo Perú, criticó duramente al gobernante, señalando que Fujimori fue condenado por delitos de lesa humanidad como matanzas cometidas por un grupo paramilitar.
Glave añadió que el indulto humanitario tiene condiciones legales como la de arrepentirse por los crímenes cometidos, a lo que Fujimori se ha negado y dijo que la gracia fue otorgada por un pacto infame y oculto.