‘Ningún país por sí solo puede hacer frente a los retos actuales (…) debemos trabajar juntos en la construcción de un futuro para la humanidad con un mundo abierto, inclusivo, limpio y hermoso, un mundo con paz duradera, seguridad universal y prosperidad común’, afirmó.
Xi insistió en que todas las naciones diseñen políticas amigables con el medioambiente, cooperen entre sí para luchar contra el cambio climático y protejan al planeta por el bien y la supervivencia del ser humano y otras formas de vida.
Según el líder, el PCCh se propuso como misión hacer grandes contribuciones a la humanidad y en los últimos cinco años colaboró activamente en esa dirección.
Por otro lado, Xi negó cualquier pretensión hegemónica de China o interés en perjudicar a otros estados con su vertiginoso progreso económico.
‘China jamás aspirará a la hegemonía ni buscará la expansión sea cual sea su grado de desarrollo (…) de ninguna manera se desarrollará a costa de los intereses de otros y su desarrollo no supone amenaza alguna para ningún país’, aseveró.
También hizo énfasis en la defensa de sus intereses, en mantener la integralidad territorial mediante una política pacífica y la postura de no interferencia en asuntos internos de cualquier estado.
