La educación militar inspirará respeto hacia los oficiales rusos

El sistema de educación militar sometido a la reforma en el período de 2008 a 2011 que produjo una aguda polémica en la sociedad vive tiempos difíciles. Los errores cometidos se corrigen simultáneamente con los cambios destinados a lograr que la escuela militar corresponda a las tareas planteadas ante las Fuerzas Armadas de Rusia.
El sistema de educación militar
Durante una rueda de prensa celebrada el pasado 12 de septiembre, el viceministro ruso de Defensa, el general Nikolai Pankov, y sus colegas comunicaron sobre la elaboración de un plan de desarrollo del Ministerio ruso de Defensa hasta 2020 en el que están determinadas todas las cifras relacionadas a las Fuerzas Armadas de Rusia, incluido el número de los oficiales que deben graduarse de los centros de educación superior. En base a este plan se realizará la admisión de cadetes a las instituciones de educación militar a las que en 2013 ingresaron más de quince mil personas, incluidos mil setecientos cadetes de colegios militares, unos 900 estudiantes de academias militares y dos mil estudiantes de los centros de educación militar subordinados a las universidades civiles.
Un mayor número de cadetes ingresados en las instituciones de educación militar debe asegurar el mantenimiento del número previsto de oficiales en las filas de las Fuerzas Armadas que asciende a doscientas treinta mil personas. En Rusia hay diecisiete centros de educación superior para los oficiales que serán renombrados de acuerdo con sus títulos históricos, en virtud del decreto presidencial.
Además, el crecimiento del número de los cadetes se acompaña con un aumento del número de los que desean ingresar en las academias militares, lo que pone de relieve que el rango de oficial vuelve a hacerse prestigioso.
El prestigio de los oficiales
El tema del prestigio y orgullo por la profesión se hace inevitablemente uno de los más principales durante la discusión del problema de educación militar, en general. Una de las consecuencias más evidentes de la reducción del financiamiento de las Fuerzas Armadas en los años 1990 y 2000, fue la renuncia de los oficiales a llevar el uniforme cuando estaban fuera del servicio. A día de hoy, esta costumbre sigue en vigor, a pesar de que las pagas aumentaron. Es evidente que para introducir cambios en los procesos que pasaban durante muchos años es necesario un tiempo demasiado largo también. A juzgar por todo, los oficiales de nueva generación no tendrán que experimentar las dificultades que afrontaron sus predecesores que completaron las filas del Ejército ruso a finales de los ochenta.
El proceso educativo está directamente vinculado con el prestigio. A día de hoy, una de las tareas principales es mejorar la educación miltar en los ámbitos donde esto es necesario para que su nivel coresponda al de la educación civil. Ante todo, se trata de las ciencias exactas, disciplinas técnicas. Esta tarea se cumple mediante la realización de los cambios en las propias academias militares, así como por establecer una interacción entre los sistemas de educación militar y civil. Se invita a los profesores de las mejores universidades de Rusia a enseñar a los cadetes, Además, aumenta el volumen de recursos financieros que se destinan para mejorar el nivel de educación militar. Empiezan a desempeñar un papel más importante sistemas digitales, desde los simuladores de material bélico hasta los equipos de entrenamiento de ejercer el mando de una unidad y la interacción de varias unidades en el teatro de operaciones.
No sólo las academias militares preparan a los oficiales
La preparación de un oficial es un proceso largo. Los que pasan todas las etapas de este proceso, desde la educación en los colegios militares, suelen alcanzar el mayor éxito, aunque hay exclusiones.
A día de hoy, los colegios militares están incluidos, de hecho, en el sistema general de eduación militar en Rusia para asegurar el desarrollo armónico de la personalidad de los oficiales desde el inicio. La nueva forma de organización establecida en los colegios militares, con la determinada estructura de las unidades, rangos de cadetes, banderas y ceremonias especiales no se debe al deseo de seguir las últimas tendencias de moda. La preparación de un oficial que debe estar dispuesto en cualquier momento de morir para defender su patria no puede limitarse sólo con la educación y ejercicios físicos. Las tradiciones militares es la base principal de un Ejército regular desde la antigüedad. Si esta base se derrumba, el Ejército empezará a degradarse, mientras que el Estado sin de las Fuerzas Armadas entrará en el caos. A día de hoy, cuando la potencia militar es una de las principales garantías de la independencia, es imposible subestimar el papel del Ejército y del espíritu de combate.
ek/lj/er
Nota: Las opiniones expresadas por el autor no necesariamente coinciden con los puntos de vista de la redacción de La Voz de Rusia.
Leer más: https://mundo.sputniknews.com/spanish_ruvr_ru/2013_09_16/La-educacion-militar-inspirara-respeto-hacia-los-oficiales-rusos-4834/
Foto: RIA Novosti