El consumo de lácteos durante el embarazo reduce el riesgo de tener un bebé con bajo peso

REDACCIÓN INTERNACIONAL.– Un estudio liderado por la Universidad de Granada (UGR) ha relacionado el consumo de productos lácteos durante el embarazo con un menor riesgo de tener un recién nacido de bajo peso.
La investigación sugiere que por cada cien gramos al día de incremento en el consumo de productos lácteos se podría reducir el riesgo de bajo peso al nacer un once por ciento.
El peso al nacer es uno de los principales determinantes de la salud del recién nacido, tanto a corto como a largo plazo. Los recién nacidos de bajo peso para su edad gestacional presentan mayor riesgo de morbilidad y mortalidad perinatal, así como de problemas metabólicos presentes y futuros, según detalla en una nota la Universidad de Granada.
El bajo peso al nacer es un problema de salud global y, por esta razón, resulta prioritario identificar factores de riesgo potencialmente modificables que permitan el desarrollo de futuras intervenciones para su control y prevención. En este sentido, la nutrición materna es un factor clave en el crecimiento fetal. Diferentes alimentos y micronutrientes, vitaminas y minerales, juegan un papel importante en el desarrollo del feto y del recién nacido.
Entre estos alimentos, el consumo de lácteos durante el embarazo resulta de especial importancia para el desarrollo de elementos plásticos del feto.
A partir de los datos recogidos para un Proyecto de Excelencia de la Junta de Andalucía sobre nutrición en el embarazo y riesgos materno-fetales, los autores de este trabajo plantearon analizar el riesgo de tener un recién nacido de bajo peso para su edad gestacional y el consumo de lácteos maternos.
Este estudio se realizó en colaboración entre investigadores del departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública de la Universidad de Granada y el Servicio de Obstetricia y Ginecología del Hospital Universitario Materno-Infantil de Granada, todos integrantes del Instituto de Investigación Biosanitaria de Granada.